Diario Uno
En un contexto poco propicio, sin subsidios del Estado, sin financiación bancaria, todos los meses continúan entregando viviendas y departamentos, generando nuevas zonas de expansión urbana que llama la atención en el país.
Cuando la recesión económica de los últimos años prácticamente redujo a la nada el mercado hipotecario argentino y alejó a gran parte de las familias de la clase media del acceso a la primera vivienda o de la seguridad de la clásica inversión en ladrillos, en San Martín, en el vértice noroeste de la ciudad, a simple vista se puede ver el ir y venir de maquinarias y obreros levantando los cimientos de nuevas viviendas.
Y también los camiones de mudanza, que traen los enceres que complementarán la ilusión de una nueva vida para más vecinos de la región, a los que se están sumando familias del Gran Mendoza y departamentos vecinos atraídos por ventajas comparativas.
Para los lugareños no es nada nuevo lo que se ve. Es que viene sucediendo esforzadamente desde hace muchos años, casi 3 décadas. Pero la dimensión de la crisis del sector de la construcción, torna más llamativo este fenómeno.
Efectivamente, los primeros barrios privados de la zona; también populosas y progresistas urbanizaciones abiertas integradas de sobrias viviendas iniciales,- muchas ya ampliadas por sus propietarios-, fueron el preludio de esta realidad que ya gozan unos 4.000 vecinos.
Así se construyeron los que hoy son barrios emblemáticos de San Martín. Mebna 1, 2 y 3; Jardín Colonial; San Pablo; Colonial Parque, los edificios Colonial Plaza y Ecopark, numerosas casas edificadas en los barrios El Trébol, La Posada, Verde Colonial y en distintas zonas de Junín y Rivadavia.
Estos desarrollos son resultado del esfuerzo del sector privado que ha generado puestos de trabajo y dinamizado el mercado inmobiliario Sanmartiniano, quizás pequeño a nivel nacional, pero que se agiganta si uno lo analiza desde la región del Este de la Provincia de Mendoza.
Innovación y Sustentabilidad
Cuando nos propusimos averiguar las razones de esta “feliz rareza”, descubrimos también que en San Martín ya está funcionando uno de los Complejos Residenciales con características sustentables más grandes del interior del país, con muchas familias viviendo y con su última etapa en plena construcción: se trata de “Terrazas de Pueblo Nuestro”, que forma parte de un proyecto mayor: “Pueblo Nuestro, Residencias & Deportes” que tiene varias particularidades que lo diferencian.
En principio su ubicación es ideal, sobre el lateral norte de la ruta nacional 7, en pleno ingreso a la ciudad de San Martín, desde donde se llega en solo 30 minutos a la Ciudad de Mendoza. Combina casas de distintos modelos, con el citado Conjunto Residencial “Terrazas de Pueblo Nuestro” un complejo cerrado de edificios a pequeña escala con diseño de avanzada.
El proyecto contempla 79 unidades, de uno y dos dormitorios y viviendas en Triplex, todos equipados con paneles solares y otros amenities que lo hacen único en la región.
Desde sus balcones hay una vista privilegiada. Allá, la cordillera. Más cerca, los viñedos.
“Pueblo Nuestro, Residencias & Deportes” que se anunciará en un par de meses conjugará barrios abiertos y pequeños barrios cerrados y el complejo en PH “Terrazas”, que ya es una realidad. Este último es el reflejo del recambio generacional de nuestra empresa, dijo Jorge Allub de Constructora Colonial, empresa que este año está cumpliendo 30 años de trayectoria. Su hijo Nicolás, a cargo del innovador proyecto y de la gerencia de la empresa nos refirió que se han adjudicado más del 80 % de las unidades de Terrazas, en su mayoría a través del Plan de Construcción de Viviendas Hábitat 99.
“Nos propusimos romper paradigmas en el interior del interior del país; la respuesta no pudo ser mejor. Nuestros clientes valoraron la innovación y contribuir a la sustentabilidad”, dijo Nicolás.
Terrazas cuenta con portería las 24 horas, kiosco smart, laundry, dispenser de bicicletas, cableado subterráneo, calefones solares, sanitarios de doble descarga, calles interiores hormigonadas, más cocheras que departamentos, todo complementado por “Deportia”, un espacio de recreación y deportes que se erige enfrente, y es una ubicación estratégica en el master plan, donde tendrán membrecías las familias que integran los emprendimientos de la icónica desarrolladora con sede en San Martín que también lanzó recientemente la tarjeta de beneficios “Club Colonial”, con el objetivo de contribuir al fortalecimiento del comercio local.
Hábitat 99
“Desde nuestros comienzos procuramos encontrar soluciones para acercar la posibilidad de la vivienda a las familias de la Zona Este, muchas veces acompañados por prestigiosas entidades intermedias como la Mutual de Empleados del Banco Nación (MEBNA), las Mutuales 6 de Noviembre y San Jorge, el Sindicato de Luz y Fuerza, el CEC San Martín. Hoy en día contamos con el vigor y la versatilidad del Plan de Construcción de Viviendas Hábitat 99, que viene permitiendo entrega de llaves prácticamente todos los meses.”, nos informan en la constructora con sede en Av. Lima y Eva Duarte de Perón.
Al inscribirse, los socios suscriptores pueden optar en marzo por una cuota de $ 6.555 o de $ 9.775. Los que optan por la primera, participan en los sorteos de una vivienda o departamento 8 meses al año, mientras los que optan por la cuota más alta participan todos los meses. Lógicamente quienes optan por la cuota más elevada terminarán antes su plan de pagos.
Todos esos aportes van a cancelar los costos de construcción de una vivienda o departamento para cada inscripto. Además de las viviendas por sorteos, mensualmente se preadjudican las casas según ranking acumulativo de puntaje. “Normalmente pactamos las fechas de entrega en un promedio de 14 meses, según el barrio elegido por los ganadores y las disponibilidades del momento. A partir de la entrega de llaves comienza a pagarse una cuota que actualmente está en $ 19.330, más seguro de vida e incendio. Se puede precancelar antes o después de la entrega sin ningún costo adicional; al contrario, con notables ventajas”.
Últimamente se han generado opciones como son las entregas programadas. En marzo se estableció una promoción limitada de $ 480.000 para un departamento de dos ambientes (1 dormitorio) y de $ 580.000 para el de tres ambientes (2 dormitorios) en Terrazas de Pueblo Nuestro. Muchos eligieron programar su entrega entre los 12 a 18 meses vendiendo un auto o un lote y posteriormente pagan una cuota similar a un alquiler.
Otros prefieren pagar su cuota de $ 6.555 o de $9.775 y esperar un tiempo, especulando con los sorteos hasta poder competir con puntaje.
Todos saben que están haciendo un esfuerzo mancomunado y, a la vez, una buena inversión. “Hábitat 99 no es un plan de dinero que le compra un bien a una fábrica de Buenos Aires o una terminal, es un plan de construcción de viviendas que ocupa mano de obra local, que adquiere materiales en la zona y que contribuye a movilizar la economía de la región. Somos una pyme con valores desde su fundación, aliada de sus proveedores locales desde hace tres décadas, integrada por colaboradores felices con su trabajo, motivados por entregar un bien primordial y que ha generado cientos y cientos de hogares, que serán el ámbito de historias y anécdotas familiares. Eso nos llena de orgullo y satisfacción“, concluyó Allub.
En primera persona
Recorrimos Pueblo Nuestro y nos encontramos con vecinos cuyas vivencias marcan lo heterogéneo del segmento abarcado:
“Yo no tengo un sueldo fijo. Fui pagando las cuotas que antes de la posesión son muy accesibles y cada vez que pude adelanté para mi puntaje. Finalmente decidí vender un lote y con eso conseguí adjudicar. Elegí un modelo nuevo de vivienda y estoy pagando prácticamente lo mismo que un alquiler. Quizás un poquito más, por el seguro de vida, pero es mío”.
“Yo acordé una entrega programada a 14 meses. Con mi novio teníamos unos ahorros. Los dos trabajamos todo el día, elegimos un departamento, nos pareció más seguro. El Complejo es innovador; no hay nada parecido en San Martín; está muy bueno. Tiene lavadero, dispensar de bicis, kiosco Smart, paneles solares, portería las 24 horas, calles internas hormigonadas, cocheras suficientes, cableado subterráneo… Enfrente vamos a tener el Club, que está quedando hermoso, y también tenemos cerquita el súper con los cines del Tadicor. Además la ciudad de Mendoza nos queda a apenas 30 minutos. Con lo que invertimos hasta el momento, apenas nos alcanzaba para un lote y los planos, y ya tenemos nuestro departamento.
“Nuestra familia tenía camiones. Decidimos venderlos y comprar departamentos. El mes que viene nos los entregan. Posiblemente uno de mis hermanos viva en el Complejo, y a los otros lo vamos a alquilar”.
“Yo me acabo de cambiar; soy inquilina. Decidí venir aquí por mis hijas. Pueden salir a andar en bici y aunque siempre hay que tener cuidado, es más tranquilo. Nadie ingresa si no lo autorizo”.